Madrid, corazón de España,
late con pulsos de fiebre.
Si ayer la sangre le hervía,
hoy con más calor le hierve.
Ya nunca podrá dormirse,
Ya nunca podrá dormirse,
porque si Madrid se duerme,
querrá despertarse un día
y el alba no vendrá a verle.
No olvides, Madrid, la guerra;
No olvides, Madrid, la guerra;
jamás olvides que enfrentelos ojos del enemigo
te echan miradas de muerte.
Rondan por tu cielo halcones
Rondan por tu cielo halcones
que precipitarse quierensobre tus rojos tejados,
tus calles, tu brava gente.
Madrid: que nunca se diga,
Madrid: que nunca se diga,
nunca se publique o piense
que en el corazón de España
la sangre se volvió nieve.
Fuentes de valor y hombría
Fuentes de valor y hombría
las guardas tú donde siempre.
Atroces ríos de asombro
han de correr de esas fuentes.
Que cada barrio, a su hora,
Que cada barrio, a su hora,
si esa mal hora viniere
-hora que no vendrá-
sea más que la plaza más fuerte.
Los hombres, como castillos;
Los hombres, como castillos;
igual que almenas, sus frentes,
grandes murallas sus brazos,
puertas que nadie penetre.
Quien al corazón de España
Quien al corazón de España
quiera asomarse, que llegue,
¡Pronto! Madrid está lejos.
Madrid sabe defenderse con uñas,
con pies, con codos,con empujones,
con dientes,panza arriba, arisco, recto,duro,
al pie del agua verdedel Tajo, en Navalperal,en Sigüenza,
en donde suen enbalas y balas
que busquen helar su sangre caliente.
Madrid, corazón de España,
Madrid, corazón de España,
que es de tierra, dentro tiene,
si se le escarbara, un gran hoyo,
profundo, grande, imponente,
como un barranco que aguarda...
Sólo en él cabe la muerte.
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