lunes, 27 de agosto de 2007

Sacco y Vanzetti. Dos nombres para el recuerdo

El 23 de agosto de 1927, en la cárcel de Charlestown, en Massachussetts, eran asesinados en la silla eléctrica Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti, junto con Celestino Madeiros. Con ello se ponía fin a un largo "affair" contra estos dos anarquistas italianos que había comenzado en 1920. LO que había sucedido durante esos siete años no es sino un cúmulo de injusticia y manipulaciones judiciales para llevar a cabo este crimen legal y con ello poder asestar un golpe al poderoso movimiento obrero americano y a la inmigración que molestaba a los sectores xenófobos y racistas de EEUU.

¿Que fue lo ocurrido con Sacco y Vanzetti?
Nicola Sacco (Torre Maggiore, Foggia, 23 de abril de 1891) y Bartolomeo Vanzetti (Villa Faletto, Cunio, 11 de junio de 1888) eran dos inmigrantes italianos en EEUU, que debido a la precaria situación económica por la que atravesaba Italia se vieron obligados a abandonar su país. Recalaron en EEUU como muchos de sus compañeros. Sacco era un trabajador del calzado y Vanzetti era pescadero. Ambos llevaban ya años en EEUU ganándose la vida como honrados trabajadores. Sacco huyo durante un tiempo del país, pues al estallar la Primera Guerra Mundial y entrar los EEUU en guerra, no quería combatir en esa guerra fratricida siguiendo así su fuerte ideario anarquista.
Con el estallido de la Revolución Rusa y el triunfo de la misma, a las autoridades políticas norteamericanas les surge el pánico. Estando al frente de del Departamento de Estado Palmer, inicia una fuerte purga contra todos los inmigrantes acusados de introducir en el país la llamada "propaganda roja y bolchevique" con el fin de subvertir el orden en EEUU. Por estas fechas es expulsada de EEUU Emma Goldman, militante anarquista de fama mundial. Con ello se quería descabezar también al poderoso movimiento obrero norteamericano, que llevaba con fuertes movilizaciones desde finales del siglo XIX. Como hitos fundamentales de este movimiento se encuentra la huelga general de Chicago el 1 de mayo de 1886, que dio paso a otro juicio farsa contra militantes anarquistas y que acabó con el ahorcamiento de 5 de ellos. Por este motivo cada Primero del Mayo los trabajadores de todo el mundo salen a la calle. A esto se viene a unir el surgimiento en 1905 del sindicato revolucionario IWW (Industries Workers of the World, también llamados Wobblies) que para 1920 tiene unos 100.000 afiliados y una gran capacidad de movilización. Solo el macartismo logra desmantelar la organización.
En Boston, en el Estado de Massachussetts, son detenidos el 5 de mayo de 1920 Sacco y Vanzetti. Su detención significaba automáticamente la expulsión del país por las órdenes del Departamento de Estado. O incluso el asesinato en comisario, como había pasado poco antes con un compañero de Sacco y Vanzetti, Andrea Salcedo, que fue arrojado por la ventana de una comisaría. Cuando son detenidos Sacco y Vanzetti les son incautadas dos pistolas, una de ellas una Colt 32.
Daba la casualidad que tres semanas antes se había producido un atraco en una fábrica de calzado en South Braintree. En ella hay una serie de disparos y mueren Frederick Palmenter, pagador de la fábrica, y su escolta Alessandro Berardelli. Las pruebas de balística decían que se había disparado con una Colt 32, aunque en realidad se hizo con una Star española, que tenía el mismo modo de tiro que la Colt. Los autores de dicho atraco fueron una banda de mafiosos italianos, donde sí estaba Celestino Madeiros, llamada como "la banda de Morelli"
Aun así las autoridades aprovecharon para decir que Sacco y Vanzetti eran los autores del crimen. El juicio tuvo como juez a Webster Thayer y como fiscal a Frederick G. Katzmann, ambos reconocidos racistas y fuertemente antiprogresista. Incluso se decía que Katzmann era miembro o cercano al Ku Klux Klan.
El juicio estuvo lleno de farsas y manipulaciones. Falsos testimonios, desaparición de testigos y ocultación de pruebas. Se pagaba a gente para decir que fueron Sacco y Vanzetti los autores del asesinato. A aquellos que cambiaban sus testimonios en el juicio se les castigaba en la calle.
La razón era clara. Había que asesinar a Sacco y Vanzetti. Su único delito ser anarquistas e italianos emigrados a EEUU. Katzmann calificó a los testimonios favorables a los acusados como "gentuza y zarrapastrosos" Cualquier prueba que se intentaba exponer era automáticamente desechada. La suerte de Sacco y Vanzetti estaba escrita.
A pesar de ello hubo una fuerte movilización en EEUU y en todo el mundo. LIBERTAD PARA SACCO Y VANZETTI, era el grito de todos los pueblos.
Incluso aparecieron los verdaderos autores del crimen. Madeiros estaba en la cárcel al igual que Morelli. Madeiros le confesó en prisión a Vanzetti que ellos habían asaltado South Braintree. Madeiros confesó al abogado de Sacco y Vanzetti que utilizaba una pistola Star.
Pero nada se pudo hacer. Incluso Vanzetti pidió clemencia al gobernador del Estado, conservador, que no se la concedió.
Aquella madrugada de agosto Sacco y Vanzetti fueron asesinados por el Estado norteamericano. La protesta popular fue total. Hoy los nombres de Sacco y Vanzetti son dos símbolos de la lucha. Y su memoria se mantuvo viva con el tiempo. Dos películas recuerdan este acontecimiento. La poco conocida de Paul Roland en 1967 titulada L´affaire Sacco et Vanzetti y la mas conocida de Guiliano Montaldo Sacco e Vanzetti. Muchas canciones country en EEUU recuerdan este acontecimiento. Mas teniendo en cuenta que el 23 de agosto de 1977, el gobernador de Massachussets, Michael Dukakis, reconoció el error judicial contra los anarquistas italianos y los declaró inocentes. Pero ya no vivía nadie a quien se le pudiera responsabilizar de dicho error que acabó con la vida de ellos.
Para acercarse a este acontecimiento desde los libros hay dos títulos básicos. El libro de Fernando Quesada Sacco y Vanzetti. Dos nombres para la protesta, editado en 1997 por Reconstruir (Argentina) y el de Helmut Ortner Sacco y Vanzetti. El enemigo extranjero de la editorial Txalaparta en 1999. Estos entre otros muchos.
Hoy recordar los nombres de Sacco y Vanzetti, es ver las luchas del pueblo trabajador y la represión que el Estado ejerce contra los que luchan por un mundo mejor.

4 comentarios:

Cuboderubik dijo...

Historias, demasiadas, donde el aparato represivo del Estado aplasta todo intento de respiración. La angustia kafkiana del cabezazo siempre contra el mismo muro; pero en cualquier caso nunca podrán con nuestras conciencias, esa batalla la tienen perdida.

Genial la película de Montaldo (genial también su banda sonora, por cierto, con música de la Baez).

(Y hablando de películas y hablando también de algún modo de halcones que asesinan palomas, la última de Medem aunque no te guste y en otro plano: "Caótica Ana").

Mauricio dijo...

Tomo nota de la película de Medem.

CLAMOR REPUBLICANO dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
CLAMOR REPUBLICANO dijo...

Hacía días que no consultaba tu blog, es fascinante la de pequeñas historias con gran significado que hay por contar.
Leer Fraternidad Universal te hace más sabio y del conocimiento de la verdad nace la libertad de pensamiento, tú contribuyes a ello inoculando el veneno del querer saber más.
Aunque no seas republicano, como anti-monárquico, te considero un magnífico compañero de viaje para lo que tenga que venir.