martes, 22 de julio de 2008

El Solitario y el anarquismo.

Hoy Público me ha publicado una carta al director. "El Solitario", el personaje este que se dedicaba a atracar bancos y a matar a gente, se ha declarado anarquista. Como suele ocurrir con todos los jetas, este tipo dice esto para descargarse responsabilidad y adjudicársela a una ideología que nada tiene que ver con el robo ni el asesinato. Como algunos medios libertarios y la prensa oficial le gusta airear esto, por motivos distintos, y como en el movimiento libertario se tiende a hacer héroes a los que no lo son, escribí un pequeño texto que han recortado. Aquí adjunto el íntegro.

¿Anarquista?
Ha salido en la prensa, y en algunos medios se ha dicho en demasía, que "El Solitario" se está autoreclamando anarquista. Es curioso que un personaje que ha llevado por vida la extorsión, el robo y el asesinato se proclame como tal una vez que ha sido detenido. Una persona que ha disfrutado de toda clase de lujo merced al robo y que ha realizado esa acción para lucrarse. Y lo peor no es lo que él diga sino que alguien le haga caso. Es la visión que la derecha reaccionaria siempre ha dado al anarquismo. Y algunos "anarquistas" dan crédito a ello. Es lo que yo llamo "anarquistas de derechas" de forma eufemística. El anarquismo es una ideología política y social que lucha por las mayores cotas de libertad. Los anarquistas en España ofrecieron un gran tributo de sangre a las causas justas de justicia social y en su lucha contra el franquismo durante la Guerra Civil y la dictadura. Lo único que hace la palabra anarquista en la boca de una persona como "El Solitario" es ensuciarse. Seamos justos.

Aquí lo dejo para que quede constancia. Un personaje como "El Solitario" no puede ser nunca anarquista. Hace falta moral y ética para ello. Y de eso carece este personaje.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Completamente de acuerdo contigo, amigo.

Carlos José Márquez dijo...

Saludos, Mauricio. No veo claro yo que esa reivindicación de este personaje por ciertos militantes pueda atribuirse a ese "anarquismo de derechas" del que hablas. Hay mucha falta de preparación ética entre los militantes, y una cierta herencia de la izquierda grupuscular respecto al tema de la violencia (recuerda a los montoneros, cuyas ideas tenían y tienen paralelismos en España).

Seguro que ya alguno ha justificado que disparara a un cajero: "dejémonos del trasnochado obrerismo, ya saben los riesgos que corren los que sirven al capital y al fascismo de esa manera", etc.

Aparte, sería el tema de cómo los medios de comunicación capitalistas marcan la agenda a los que se dicen anticapitalistas.

Canichu, el espía del bar dijo...

queda dicho en tu carta.

Mamá de Vida dijo...

Como siempre, de acuerdo contigo, compi. Muy interesante, también, la aportación de Carlos. El engañabobos de la desinformación ""capitalista"" con su disfraz de transparencia y veracidad no engaña hoy en día a nadie. Aunque siempre hay quien quiere ser engañado.

Que el señor robabancos y asesino se denomine anarquista no pasaría de una anécdota entre los juristas y los testigos presentes si no fuera porque a alguien le interesa colarnos la bola de mala manera. Muchas risas en los telediarios, pero bien que le han buscado pies y pies al gato: que si su madre no sé qué, que si la abuela fuma porros... Lo peor, sin duda: que entre nosotros todavía haya gente que defienda la violencia de esa manera. Estoy con Carlos "herencia de la izquierda grupuscular". Y con Mauricillo, de esa izquierda "de derechas". Anarquistas de salón (y revista, ¿verdad, Carlos?).

Un abrazo, chicos.