Hace pocos días me acordé de esta obra de Nikolai Ostrovski: Así se templó el acero. Una obra que leí hace muchos años. Recuerdo que se la compré a un buen amigo mío librero. Acababa de leer la obra de Máximo Gorki La madre de la que había visto también la adaptación cinematográfica de Vsevolod Pudovkin. Por aquella época, mis años universitarios, devoraba distintos libros relacionados con una de mis grandes pasiones desde entonces: la Revolución rusa. Me acuerdo aquel día que visité el puesto de libros de mi amigo José Ramón y me mostró la obra de Ostrovski. No lo dudé y la compré por un precio realmente bajo. Precio de amigo, se diría.
Hace unas semanas, repasando algunas cosas de la Revolución rusa para un curso que di me acordé de Ostrovski. Y me acordé de esta obra. Uno de los ejemplos de la literatura comunista.
Aquí no voy a valorar la calidad de la obra. Si es buena o es mala. Eso es cuestión de gustos. Pero diré la razón por la que esta obra me marcó. Primero por la personalidad del autor. Nikolai Ostrovski nació el 29 de septiembre de 1904. Siendo muy joven se unió al movimiento revolucionario y se encuadró con los bolcheviques en la Revolución de 1917 y durante la Guerra Civil rusa. Estuvo en la Brigada de Caballería Kotovsky. Pero durante la Guerra Civil Ostrovski fue herido y también contrajo el tifus, lo que hizo que sus heridas y su estado de salud entrase en un proceso irreversible. A pesar de ello siguió ocupando cargos en el Ejercito, en el Komsomol (Juventudes Comunistas) y trabajando, hasta que en 1925 fue internado en un sanatorio en Crimea.
A pesar de todos sus inconvenientes, Ostrovski comenzó a estudiar a distancia en la Universidad de Sverdlov. Ciego y casi sin poder moverse, Ostrovski escribió numerosos artículos y participó de la radio, convirtiéndose en uno de los escritores más afamados de la Unión Soviética. Falleció con apenas 32 años de edad (el 21 de diciembre de 1936).
Su obra Así se templó el acero es uno de los mejores panoramas del periodo que vivió. Ostrovski se enmarca a la perfección en las corrientes el realismo socialista y defiende con vehemencia la política bolchevique. El propio título es un guiño a Stalin. La palabra Stalin significa "acero". Y así se templó ese acero para Ostrovski. El protagonista de su obra es Pavel Korchaguin, su alter ego. La obra no deja de ser una autobiografía novelada del autor. En ella defiende la actuación bolchevique en la Revolución de 1917 y en la Guerra Civil. Todos los lugares comunes de la propaganda estalinista se aglutina en la obra de Ostrovski. La personalidad del propio Ostrovski, de no parar hasta conseguir sus objetivos y ponerlos al servicio de la Revolución se notan en cada uno de los párrafos de la novela.
La recuerdo con un cariño enorme porque de una forma sencilla entendí todo lo que significó el estalinismo para la sociedad rusa de la década de 1920 y 1930. Una novela que nos lega la mentalidad de un país en ese momento. Como intelectuales de toda talla defendían al Estado soviético por encima de cualquier cosa. La obra de Ostrovski no solo muestra ese apoyo al estalinismo sino también la denuncia contra el trotskismo, al que consideraban traidor.
Esta obra de Nikolai Ostrovski es recomendable. No por la ideología que destila, en la que no comparto nada. Sino porque se puede tomar como un documento histórico, sociológico y antropológico. Así se templó el acero es una joya de la literatura. Como lo es desde el punto de vista contrario El caso Tulayev del gran escritor Víctor Serge y que reseñé también en este blog (http://fraternidaduniversal.blogspot.com.es/2014/05/la-represion-en-tiempos-del-estalinismo.html)
Si tienes oportunidad de leer la obra de Ostrovski no lo duden.
Pd: Sé que hay una adaptación cinematográfica soviética de la obra de Nikolai Ostrovski. No la he visto pero no me importaría nada poder verla.
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